Ayer, 14 de diciembre, los Sexy Zebras finalizaron la gira de su último disco, Hola, somos los putos Sexy Zebras, por todo lo alto en la inauguración del ciclo Escenario Eslava de la sala Joy Eslava de Madrid.
Empezaron la noche los chicos de Kitai, dando un concierto llenísimo de energía y mucha locura. Su música se convirtió en la banda sonora de los primeros pogos de la noche, llegando a enloquecer a gran parte del público. La cercanía que tiene la banda con los espectadores se palpaba con cada canción. Fue tanta la cercanía que el cantante llegó a bajar del escenario para golpearse en un pogo con el público.
Tocaron los temas de su primer disco, Que vienen, haciendo un auténtico espectáculo musical donde hubo espacio para la locura y el caos (rompieron un ukelele contra el suelo) y también para la calma con la canción Kitai. Fue un comienzo de la noche perfecto.
Llegó el turno de los esperados Sexy Zebras, que cargados de ganas y también con algo de pena por ser el último concierto de una gira que ha durado dos años, dieron rienda suelta a los temas de Hola, somos los putos Sexy Zebras y también rescataron temas míticos de Volvamos a la selva. Empezaron con Caníbales, a la que siguieron Visitantes y Vivos o Muertos.
El ambiente entre el público volvía a estar caliente y volvieron los pogos mientras Gabi, Jose y Samu lo daban todo en el escenario con La Flaca, una Babilonia llena de sensualidad o Libres. Con Vagabundos y TNT, dos auténticos himnos de la banda madrileña, el público disfrutó al máximo, así como los Zebras sobre el escenario.
Tocaron El perro Jeffrey, una brutal La Máquina, Salvajes y El Semental. La Joy Eslava tembló cuando fue el turno de Hijo de puta, al coro de "Hijo de puta el que no salte". Tras un pequeño parón, volvieron al escenario a tocar Búfalo Blanco y El Fugitivo, en un final apoteósico. Jose Luna y Gabi Montes volaron sobre los brazos del público y en definitiva los Sexy Zebras se exprimieron al máximo en un concierto que ellos mismos consideraron "raro" y que fue, sin duda emotivo y brutal.
Os dejamos algunas fotos del concierto y un par de vídeos de lo que ocurrió por allí.
Tocaron los temas de su primer disco, Que vienen, haciendo un auténtico espectáculo musical donde hubo espacio para la locura y el caos (rompieron un ukelele contra el suelo) y también para la calma con la canción Kitai. Fue un comienzo de la noche perfecto.
Llegó el turno de los esperados Sexy Zebras, que cargados de ganas y también con algo de pena por ser el último concierto de una gira que ha durado dos años, dieron rienda suelta a los temas de Hola, somos los putos Sexy Zebras y también rescataron temas míticos de Volvamos a la selva. Empezaron con Caníbales, a la que siguieron Visitantes y Vivos o Muertos.
El ambiente entre el público volvía a estar caliente y volvieron los pogos mientras Gabi, Jose y Samu lo daban todo en el escenario con La Flaca, una Babilonia llena de sensualidad o Libres. Con Vagabundos y TNT, dos auténticos himnos de la banda madrileña, el público disfrutó al máximo, así como los Zebras sobre el escenario.
Tocaron El perro Jeffrey, una brutal La Máquina, Salvajes y El Semental. La Joy Eslava tembló cuando fue el turno de Hijo de puta, al coro de "Hijo de puta el que no salte". Tras un pequeño parón, volvieron al escenario a tocar Búfalo Blanco y El Fugitivo, en un final apoteósico. Jose Luna y Gabi Montes volaron sobre los brazos del público y en definitiva los Sexy Zebras se exprimieron al máximo en un concierto que ellos mismos consideraron "raro" y que fue, sin duda emotivo y brutal.
Os dejamos algunas fotos del concierto y un par de vídeos de lo que ocurrió por allí.
Texto y vídeo: Quike D-B
Fotografías: Mar Velasco
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